Hace casi exactamente 60 años que nació un icono. Hay muchos mitos que rodean el origen de Dr. Martens: accidentes de motos, lesiones de esquí. Un agujero gigante en la industria. Una cosa sí que es definitivamente verdadera: el diseño original de las botas fue una colisión entre dos mundos: la innovación de la ingeniería alemana y muchas décadas de tradición británica en fabricación de zapatos. Esta fusión, en principio no tan obvia, fue el primer paso de lo que se convirtió la impredecible e increíblemente diversa historia de la marca.
Nadie pudo predecir que la cultura de los 60 adoptara las “Docs” como parte de su uniforme. Y tampoco nadie predijo que Pete Townshend se pusiese un par de Docs en el escenario de los Who en 1967. En pocas décadas, estas botas con cámara de aire se empezaron a llevar en talleres de trabajo, en escenarios musicales y en las calles, y también se dejaban ver en el mundo de la moda como trasgresor. Las conocidas y nada convencionales señas de identidad de las botas – costuras amarillas, las suelas estriadas y la cinta escrita al final del talón de las botas – se convirtieron en un símbolo del orgullo de las clases trabajadoras y propia expresión.
Haciendo un avance rápido de 60 años, y viéndolo desde fuera, poco ha cambiado. Las botas Dr Martens se siguen haciendo de la misma manera: de los mismos materiales, usando el mismo proceso, y generalmente en la misma fábrica. Siguen siendo botas cómodas, duraderas y que mejoran con el uso. Lo único que ha cambiado, y sin vuelta atrás, es la gente que las usa. Los innovadores, los rebeldes, lo pensadores libres fueron los que convirtieron a un simple fabricante de botas británico en una conocida marca global y alternativa.
En 2020, la Comunidad Docs es un grupo de subculturas e individuos en evolución constante, de distintas edades y nacionalidades. Los detalles principales que en su día marcaron a unas simples botas de trabajo, son reconocidas en el mundo entero como una insignia de actitud inconformista. Gente que va en contra de la masa. Gente que lucha por un cambio y que nunca va a aceptar el status quo. Ellos son los que conseguirán que el espíritu de Dr. Martens durará otros 60 años más.