Cada vez más consumidos y apreciados, rara es la semana que no veamos a alguna famosa modelo, actriz, cantante o influencer con un batido, un yogur o una ensalada de arándanos, pero… ¿merece esta fruta la condición de superalimento que los nutricionistas de las celebrities le otorgan? La respuestas de los expertos consultados parece ser que sí, porque este pequeño y vistoso fruto es uno de los más potentes antioxidantes de la naturaleza, aporta muy pocas calorías y puede incluirse tanto en platos salados como dulces e incluso en panes.
Parece ser que Madonna siempre exige un bol de arándanos frescos en sus camerinos, Kim Kardashian los incluye en su desayuno diario, Kate Hudson los añade habitualmente a sus ensaladas mientras que Miranda Kerr asegura que junto con las almendras, son su snack favorito. Pero… ¿qué tienen los arándanos para ser tan apreciados? El secreto de su éxito no es otro que sus innumerables propiedades, su particular sabor ácido y dulce a partes iguales y sus múltiples posibilidades gastronómicas, ya que puede utilizarse en recetas dulces como bizcochos o mermeladas o en platos salados en forma de salsa, como topping de ensaladas y quesos, o de relleno en algunas carnes e incluso dentro de un pan.
La clave está en los antioxidantes
El arándano es la fruta de las celebrities y no es por casualidad, ya que en poco tiempo se han convertido en uno de los alimentos más recomendados por los expertos en nutrición de todo el mundo, gracias a sus incontables ventajas. Como señala el experto nutricionista Sergio González, de Nutriheart: “Los arándanos son un alimento con un aporte energético muy bajo, apenas 42 kcal por 100gr, son una de las frutas con mayor cantidad de propiedades antioxidantes -gracias a sus antocianinas- y además son una buena fuente de fibra, de vitaminas -sobre todo Vitamina C -y de minerales como calcio y potasio. Todas estas cualidades nos llevan a decir que los arándanos, dentro de un estilo de vida saludable, pueden ayudar a mejorar la tensión arterial, el perfil lipídico y a reducir el efecto de los radicales libres”. ¿Se puede pedir algo más? Pues parece ser que sí. A juzgar por los estudios realizados al respecto: “Los antioxidantes presentes en los arándanos neutralizan los radicales libres de nuestro organismo y reducen la inflamación. De hecho se han asociado sus compuestos bioactivos con múltiples efectos protectores para nuestra salud: como la prevención del cáncer o la reducción del riesgo de enfermedades cardiovasculares y neurodegenerativas” como nos explica la dietista-nutricionista Raquel Conty, de Fitnatura.
Por todo ello es muy recomendable incluir esta pequeña fruta en nuestra dieta habitual, y aunque puede parecer que es un producto con pocas posibilidades gastronómicas, nada más lejos de la realidad. Si nos fijamos, los arándanos están cada vez más presentes tanto frescos como secos o incluso congelados, formando parte de multitud de platos: “En el caso de los frescos y congelados mantienen sus propiedades y nutrientes esenciales. En cambio desecados y calentados pueden perder parte de estas propiedades. Como cualquier alimento, cuanto más natural menos pérdida de sus propiedades nutricionales“, asegura Raquel Conty.