Ahora que ya están aquí las vacaciones de verano y tanto si se eligen destinos cercanos como lejanos, uno de los detalles a tener en cuenta es el seguro médico, especialmente si viajamos a otros países o a zonas con escasa cobertura asistencial médica.
Los accidentes o las enfermedades repentinas pueden echar a perder el viaje. Así que al menos para evitar cifras astronómicas o ausencia de asistencia, Kiwi.com da cinco pautas para ir bien cubiertos y a salvo de cualquier contingencia:
¿Dónde es más caro y dónde más barato contratarlo?
Según Numbeo.com, Ucrania, Hungría, Rumania, o Bulgaria serían algunos de los países más baratos donde contratar un seguro (una media de entre 45 y 60 euros). Por el contrario, los países nórdicos como Dinamarca o Noruega suben exponencialmente sus precios, al igual que Reino Unido cuyos precios oscilan entre los 70 y 85 euros. En cuanto a España, ciudades como Barcelona y Málaga son más caras (media de 75 euros) justo al contrario de Madrid o Valencia, que cuestan alrededor de 10 euros más. Si viajamos a Asia, un destino muy de moda en los últimos años, Kazakstán, India, Nepal o Vietnam son más económicos (media de 55 euros), mientras que Tailandia, Corea del Sur o Japón, los más caros (media de 85 euros).
Un seguro que incluya traslado en avión medicalizado
Según el Ministerio de Exteriores, es recomendable contratar un seguro médico que cubra los gastos de hospitalización y tratamiento médico, ya que de tener que asumirlo el paciente, pueden llegar a ser muy elevados. Un traslado en avión medicalizado debe ser una de las opciones incluidas (de no serlo podría llegar a costar en torno a los 50.000 euros desde, por ejemplo, Estados Unidos). Si se va en vuelo regular en camilla asistido por un médico, el coste desciende hasta los 20.000 euros.
Actividades de riesgo, también deben estar incluidas
Desde el submarinismo hasta el parapente o kite-surf. También actividades de motor como rallies o más arriesgadas como alpinismo, espeleología, espeleo-buceo, etc), suelen requerir de una cobertura adicional y que se incluya expresamente la realización de esa actividad en el extranjero. Si se produce un accidente, ni las Embajadas ni los Consulados disponen de recursos para hacer frente o garantizar los costes en caso de accidente.
Tarjeta Sanitaria Universal
Independientemente del seguro médico que contratemos, la Tarjeta Sanitaria Europea (TSE) es un documento personal e intransferible que puede solicitarse cuando viajamos, al margen de la tarjeta sanitaria propia de cada país. Nos asegura el derecho a recibir la misma asistencia que los ciudadanos en el país de destino, bien sea durante una estancia temporal en el territorio del Espacio Económico Europeo (1) o Suiza, independientemente de que el objeto de la estancia sea el turismo, una actividad profesional o los estudios. Se puede solicitar online en pocos minutos o bien en las oficinas de la Seguridad Social.
¿Cómo contratar un seguro médico?
Hay varias opciones además de la más tradicional, que es contratarlo a través de una aseguradora bien general o de servicios de salud. Las agencias de viaje generalmente ofrecen algún tipo de seguro médico de viaje a los clientes que contratan paquetes turísticos completos, aunque por lo general se trata de coberturas muy básicas, por lo que normalmente se requiere contratar servicios adicionales. Asimismo, algunas tarjetas de crédito también incluyen asistencia en viajes, pero no está de más comprobar las condiciones.
Revisar siempre el máximo que cubre
No por contratar un seguro médico estamos exentos de cualquier problema. Hay que asegurarse que cantidad máxima se cubre. Y dependiendo del seguro hay unas cantidades u otras. El mínimo recomendable es 18.000 euros teniendo en cuenta que gastos tan básicos como una ambulancia son 700 euros y una noche de hospital, hasta 3.500 euros.