Fue un extraño homenaje a Luis Eduardo Aute…
A un Luis Eduardo Aute convaleciente que no pudo acudir…
Y aunque él no estuvo, si estuvimos todos los amigos, conocidos, admiradores (muchos se quedaron fuera), seguidores y demás personal que, de un modo u otro, tenemos una vinculación con Aute más allá de la relación entre artista y público…
Aute, como alguien lo definió en esa emotiva noche, es una especie de hombre del Renacimiento porque ha tocado muchos palos y en todos lo ha hecho bien, muy bien y genial…
Y digo extraño homenaje porque parecía algo que sonaba triste, un aire como de ausencia…
Luis Antonio de Villena, Fernando Beltrán y Miguel Munárriz se repartieron el trabajo de evocar la persona de Aute, cada uno desde su faceta…
Así Luis Antonio habló de ese Aute que es un detallista, un amigo de sus amigos, un hombre bueno y honrado…
Fernardo Beltrán intento componer un retrato poético del artista…
Y Miguel Munárriz leyó una carta que nunca envió al cantante, dibujante, pintor, cineasta… jugando con versos y títulos de sus canciones…
Y todos de acuerdo en que Ate es un hombre libre, respetuoso, irreverente, anárquico, anacrónico, imprudente, amigo, leal, sensual, hogareño…
Y que siempre huye de estar en primer plano, eso que ahora está tan de moda…
Luego vendrían Pastora Vega, José Luis Gómez y Aitana Sánchez Gijón para recitar poemas del homenajeado…
Después tocó el turno a cantantes, y por allí pasaron y cantaron, lógicamente, Ana Belén, Xoel López, Cristina Narea y Luis Mendo. Y como broche, Miguel Poveda, que se permitió el lujo de cantar a capella y de modo improvisado una especie de soneto que no era tal, que en su momento les envió Luis Eduardo a él y a Pedro Guerra…
Y después nos marchamos y allí quedaron flotando los versos…
“Y el mar era un silencio que se curó con olas”…
¡Ah! Se me olvidaba con tantas emociones…
Nos reunimos allí, en el Salón de Columnas del Círculo de Bellas Artes, por una noche, como otro de los presentes dijo, convertido en Círculo de Bellas Autes, bajo la premisa de que se presentaba el volumen que reúne la obra poética y que se llama “Toda la poesía de Luis Eduardo Aute”…
¿Queda claro?
Pues eso…
Mientras tanto, seguimos queriendo a Aute, a su música, a sus letras, a sus poesías, a sus dibujos, a sus pinturas, a él y todo lo que representa…
Escucha Eduardo:
Esperamos verte pronto…
Gracias.