… aunque no pudo acudir la actriz (Adriana de Montserrat) que es el hilo conductor de la obra…
Partiendo de la improvisación como motor creativo, Pol Jiménez plasma su visión del filme “Kill Bill” de Quentin Tarantino bajo la influencia de cuerpos boleros y danza española, aprovechando toda la riqueza cinematográfica que ofrece esta película. En palabras del coreógrafo, “podía ver perfectamente a Uma Thurman con las castañuelas y los zapatos, preparada para salir a escena, posee todos los rasgos de una bailarina de danza española”.
Algunos apuntes de Pol sobre la obra:
“Quería que las bailarinas se sintieran cómodas y libres en escena, porque muchas veces no acabas de encontrarte cómodo y si no estás convencido de lo que estás realizando no consigues comunicar al público, por eso los personajes que van apareciendo en “Katakana” son ellas mismas, porque aunque tenía ideas preconcebidas quería que ellas creasen sus personajes.
Tampoco hay un hilo conductor porque quería tratarlo como concepto y que cada uno haga sus propias interpretaciones de lo sucedido…”
“El primer trabajo fue mucho improvisar, improvisar… para ver el movimiento natural que salía de ellas, cuál era su forma, para de ahí extraerlo y desarrollarlo y el hecho de incorporar el lenguaje de danza española no hizo falta insistir mucho porque ellas procedían de ese estilo y no fue difícil hacerlo. Adriana, la actriz, que no ha podido venir, es un pilar importante porque tiene mucha relación con la venganza y se convierte en el hilo conductor que las mueve y el ojo que observa todo desde fuera…”
“Hemos partido de la danza española para crear nuestro propio universo con la influencia principal de Kill Bill, que la primera vez que la vi me causó mucha impresión y la relacioné directamente con la danza española, con esos gestos y esos movimientos y el ritmo y me di cuenta que tenía que hacer algo con la película…”
Pol Jiménez es un bailarín ecléctico, que se ha decantado profesionalmente hacia la danza española apostando siempre por la innovación y sinceridad. Muestra de ello es su espectáculo “NU” (Desnudo), estrenado con gran éxito de público y crítica en el Festival Ciutat Flamenco de Barcelona, en mayo 2015. Trabaja como coreógrafo y bailarín de “El Amor Brujo, el fuego y la palabra” de la Fura dels Baus, y en la pieza “Sentimsentits”, una reinterpretación de solo “Glimpse” de Cesc Gelabert, ganadora del programa RE-MOU-TE de l’APDC 2015.
Katakana:
Dirección y coreografía: Pol Jiménez
Asesor artístico: Guillem Jiménez
Bailarinas: Ana Botía, Elena Ciruelos y Carmen Muñoz.
Actriz: Adriana de Montserrat
El Centro Danza Canal (CDC), dependiente de la Comunidad de Madrid, ofrece residencias artísticas a los profesionales, tanto creadores como compañías, que desarrollen su línea de trabajo en torno a la danza o las artes del movimiento, y que tengan como objetivo investigar o realizar nuevos proyectos en este ámbito.
El katakana (片仮名 o カタカナ?) es uno de los dos silabarios empleados en la escritura japonesa, junto con el hiragana. Su invención se atribuye al monje Kūkai, o Kobo Daishi. También se suele usar el vocablo katakana para referirse a cualquiera de los caracteres de dicho silabario. Cuando se alude al conjunto de silabarios hiragana y katakana se le conoce como Kana. De los dos silabarios es el más reciente.
Sus caracteres no tienen valor conceptual alguno, sino únicamente fonético. Gráficamente son de forma angulosa y geométrica.
El silabario katakana consta de 46 caracteres, que representan sílabas compuestas por una consonante y una vocal, o bien una sola vocal. De las consonantes, únicamente la 'n' debe ir sola.