Esta curiosa historia se sitúa en la península de Istria, la más grande de todo el Adriático, una región que abarca tres países, Croacia, Italia y Eslovenia. En origen tiene como protagonistas a los piratas, que habitaron esta península hasta que los romanos les expulsaron en el año 177 a.C
El vampiro de Jure Grando: atracción turística en Kringa
El caso de Jure Grando, un vampiro en Croacia es el caso de vampirismo, documentado con testigos, más antiguo de Europa. Tuvo lugar en el interior de la región de Istria. Y la memoria del vampiro sigue presente como atracción turística en Kringa, la localidad donde vivió y murió.
Mucho antes de que el personaje Conde Drácula se convirtiese en el vampiro más famoso, ya existía en Europa un caso documentado con testigos sobre un muerto viviente.
Cuenta la leyenda que en la localidad de Kringa, en la región de Istria, vivía un campesino llamado Jure Grando. Tras su muerte en 1656, hubo testimonios que aseguraban que salía de su tumba transformado en un ser maléfico. El cuerpo del campesino aparecía con una sonrisa diabólica y ensangrentada, se podía sentir su profunda y espantosa respiración.
Durante 16 años estuvo aterrorizando y maltratando a su viuda y a los vecinos de la localidad de Kringa. En varias ocasiones los aldeanos, junto al párroco, trataron de poner fin al maleficio asaltando al vampiro con crucifijos y perforándole el corazón con palos de espino, pero sin resultado alguno. Incluso, aquello empeoró la situación ya que el vampiro empezó a vengarse de sus agresores causándoles gran sufrimiento.
Una noche, nueve vecinos y el párroco se dirigieron al cementerio portando una cruz, lámparas y un palo de espino. Desenterraron el ataúd y encontraron un cadáver perfectamente conservado con una sonrisa en su rostro. El palo de espino no perforaba su cuerpo, por lo que decidieron decapitarle. El cuerpo se puso en pie y luchó sangrando contra los vecinos, pero finalmente se rindió. A partir de aquella noche del año 1672, la paz regresó al pueblo de Kringa.
Curiosamente el sepulcro de Jure Grando no aparece en la localidad de Kringa, probablemente los vecinos se deshicieron de él por miedo a que Grando regresara a sus vidas. Sin embargo, todavía existe en el recuerdo que hubo un vampiro en Croacia, la memoria del vampiro sigue presente en el Museo Jure Grando y en algunos cafés y restaurantes de la localidad.