La imagen internacional de Brasil como “país tropical” donde imperan el sol, la playa, y la selva; esconde otros impresionantes paisajes que se extienden lejos de la costa. Uno de ellos es la Região das Hortênsias (La Región de las Hortensias) una comarca turística del Estado brasileño de Río Grande del Sur. Ubicada al norte de Porto Alegre, es una región caracterizada por un paisaje de sierra, su clima frío y su cultura predominantemente centroeuropea.
Región caracterizada por un paisaje de sierra
Esta región comprende cinco ciudades: Canela, Gramado, Nova Petrópolis, Picada Café y São Francisco de Paula unidas por la RS 235, una de las rutas más pintorescas de Brasil.
El nombre se debe a la gran cantidad de hortensias, que caracterizan tanto los jardines privados como las plazas, calles y rutas, una peculiaridad de las hortensias en esta área es su coloración azul, producto de la acidez del suelo brasileño. Si bien son visibles en toda la región, es en Gramado dónde se la ha tomado como símbolo.
El nombre se debe a la gran cantidad de hortensias
Todas las ciudades de la comarca cuentan con atractivos turísticos apreciables. Nova Petrópolis conserva viva la herencia alemana en su arquitectura, culinaria y fiestas típicas. Gramado, la ciudad turística más importante de Río Grande del Sur y una de las más visitadas del país, posee una oferta hotelera y gastronómica sin igual, además de ser un centro productor de textiles, cueros, muebles y chocolates. Canela, a 8 kilómetros, es un buen lugar para practicar ecoturismo. El Parque Estadual del Caracol, con su cascada, y el Valle de Ferradura, son dos de sus más famosos puntos turísticos. Finalmente, São Francisco de Paula se presenta como un pueblo típicamente gaucho, donde es posible apreciar la cultura campestre de Río Grande del Sur. Todo el circuito puede ser complementado con una visita al Parque Nacional de Aparados da Serra, en Cambará do Sul, que posee el cañón más grande de Sudamérica: el Itaimbezinho, de 700 metros de profundidad.
Comencemos un recorrido por este corredor turístico brasileño
Canela
La ciudad de Canela es sinónimo de tranquilidad, dado que ofrece distintas opciones de ocio y descanso. La misma reúne bellos parques y atractivos turísticos, que utilizan como escenario sus bellezas naturales, una selva nativa, el aire puro, el agradable canto de los pájaros, además de una hermosa arquitectura, todo ello para recibir muy bien al visitante y proporcionarle momentos de paz, diversión y recreación.
Ya su gastronomía contempla varias culturas, con una excelente atención y deliciosos sabores cuidadosamente aderezados. A modo de ejemplo, la tradicional parrilla, el romántico fondue y el dulce chocolate casero son especialidades que agradan a cualquier paladar. Asimismo, brinda acogedores hoteles y posadas, con mucho confort y una atención diferenciada.
Por otra parte, eventos culturales y de recreación para todas las edades se llevan a cabo durante todo el año. Posee además un variado comercio en el que destacan los tejidos, la artesanía, el cuero y las tiendas de reconocidas marcas.
Canela, es un buen lugar para practicar ecoturismo. El Parque Estadual del Caracol, con su cascada, y el Valle de Ferradura, son dos de sus más famosos puntos turísticos
Sus bellezas naturales, siempre bien cuidadas y conservadas, llaman la atención de sus visitantes, en un escenario con parques cubiertos de selva nativa, caídas de agua de 131 metros, senderos, montañas y valles con paisajes inolvidables. Todo ello representa una verdadera tentación, tanto para las parejas románticas como para las familias que buscan recreación al aire libre, asimismo, para los aficionados al ecoturismo. Por otro lado, se realizan constantes proyectos a fin de brindarle novedades y seguridad a su público.
Gramado
En el comienzo de la Serra (Sierra) Gaúcha, donde Brasil se caracteriza por un clima frío durante el invierno, se encuentra la encantadora ciudad de Gramado, que fue colonizada por los alemanes e italianos, quienes la construyeron en medio de la naturaleza y le dieron ese aire europeo. Dicha ciudad destaca por su arquitectura, sus calles floridas y su comercio de artesanía, ropas de lana y de cuero, además de objetos de decoración, vinos, quesos y sus famosos chocolates. Entre colinas y bosques, coquetos hoteles y posadas hacen de la estancia del viajero un momento verdaderamente placentero, rodeado de un servicio de calidad y una excelente atención. Ya su gastronomía se caracteriza por los sabores alemanes e italianos y por el refinamiento de los ambientes. La naturaleza que envuelve a Gramado con la tranquilidad y originalidad de sus colonias y con la imponencia de sus montañas y cañones son un incentivo para emprender este viaje de aventura.
Además, es conocida nacionalmente como la Capital del Cine, puesto que alberga el festival más importante del país: el “Festival de Cine de Gramado”, el cual premia al cine brasileño y latinoamericano y hoy reúne a cineastas de varios países.
Gramado destaca por su arquitectura, sus calles floridas y su comercio de artesanía, ropas de lana y de cuero
Llamada también la “tierra del chocolate”, esta ciudad se caracteriza por sus casas de madera artesanal de estilo bávaro, además de restaurantes especializados en fondue, cafeterías ubicadas en una calle bajo techo y decenas de chocolaterías.
Asimismo, tiene la fama de ser la ciudad favorita de las parejas recién casadas de las distintas regiones del país, dado que suelen elegir sus paisajes como escenarios de una luna de miel. Y en pocas palabras: ¡el romanticismo del otoño, el calor de la chimenea acompañado de un buen vino durante el invierno, la alegría y el colorido de las flores en la primavera y la energía del verano hacen de Gramado una ciudad simplemente increíble!
Dotada de una excelente infraestructura hotelera, además de posadas y restaurantes, la ciudad de Gramado brinda diversión y ocio para todas las edades. Asimismo, es el ambiente elegido por diversas compañías para encuentros empresariales y profesionales. Sin lugar a dudas, Gramado cautiva a todos por sus calles floridas, los detalles en su arquitectura y por la hospitalidad de su gente. Y el año termina con una tradicional programación navideña: el “Natal-Luz”, donde no faltan las luces, los sonidos y colores.
En diciembre de 1986, con motivo de la Navidad y a modo de sugerencia por parte de la Comisión Organizadora de la 12ª Fiesta de las Hortensias, se creó un recorrido por la avenida principal de Gramado. Diversos coros cuyos participantes llevaban en sus manos velas encendidas mientras entonaban cánticos navideños, marcharon en un transcurso que contó con la participación de la comunidad y que culminó en la Praça da Igreja Matriz (Plaza de la Iglesia Matriz), donde la Orquesta Sinfónica bajo la dirección del maestro Eleazar de Carvalho de Porto Alegre ya les esperaba para ofrecer un gran concierto de música clásica y navideña, en un espectáculo de mucha luz y emoción.
Nacía así el “Natal Luz”, un espectáculo de fuegos artificiales, sonido, luces, desfiles, y uno de los mayores eventos navideños del mundo.
Bento Gonçalves
La ciudad de Bento Gonçalves es un importante polo industrial y turístico de la Serra Gaúcha. Su vocación industrial y turística se mezcla con la cultura de su pueblo, pues la fuerza de su trabajo ha logrado el desarrollo de la industria. Por otro lado, la conservación de la cultura de su origen ha creado un núcleo de atractivos turísticos relacionados a la uva y al vino.
La ciudad de Bento Gonçalves está situada en lo alto de la Serra Gaúcha. Su gente es acogedora y su naturaleza es exuberante, tanto es así que figura entre las 10 mayores economías de Rio Grande do Sul.
Por otra parte, Bento Gonçalves posee el título de Capital Brasileña de la Uva y el Vino. Asimismo, alberga varias fiestas y ferias alusivas a la uva y al vino. A propósito, la Fenavinho - Fiesta Nacional del Vino - es la fiesta comunitaria más grande y antigua del municipio.
Por ello, Bento Gonçalves es uno de los itinerarios turísticos más bellos e importantes de la Serra Gaúcha, con paisajes ‘bordados de parrales’ y una naturaleza exuberante, su vocación es el turismo.
Electa por el Ministerio de Turismo como uno de los 65 polos inductores de turismo de Brasil, destaca además por su hospitalidad. Anualmente, esta ciudad recibe un promedio de 800 mil visitantes, que buscan el clima acogedor de la sierra, el buen vino y la gastronomía italiana en hartura. En el área urbana de la ciudad o en su entorno, junto a los distritos, pueden apreciarse los distintos atractivos que ofrece. Ya el contacto directo con la naturaleza puede contemplarse a través de la práctica de diversas actividades de ecoturismo.
Vale dos Vinhedos (Valle de los Viñedos)
El Vale dos Vinhedos representa el legado cultural e histórico dejado por los inmigrantes italianos, que llegaron a Brasil en 1875. Las costumbres y tradiciones se encuentran arraigadas tanto en las personas como en el paisaje del Vale dos Vinhedos. La construcción de capillas y capiteles, la devoción a los santos, el dialecto veneciano y, principalmente, el cultivo de la vid y la producción del vino son huellas de la inmigración italiana.
Vale dos Vinhedos es la primera región de Brasil en obtener Denominación de Origen
Valles y montañas cubiertos de parrales caracterizan el Vale dos Vinhedos, donde la vocación por la vitivinicultura muestra todo su potencial. Las pequeñas propiedades rurales dividen su espacio con bodegas de destaque nacional e internacional por la calidad de sus vinos.
Cabe destacar que el Vale dos Vinhedos es la primera región de Brasil en obtener el Sello de Origen para sus vinos. El reconocimiento se dio en 2002, garantizando la conquista del Sello de Origen Vale dos Vinhedos (I.P.V.V.) a los vinos finos producidos allí.
Asimismo, el Vale dos Vinhedos es la primera región de Brasil en obtener Denominación de Origen. Más información sobre la distinción Denominación de Origen Vale dos Vinhedos (D.O.V.V.) de vinos en el sitio web de Vale dos Vinhedos.
Caminho das Pedras (Camino de las Piedras)
Legítimos representantes de la cultura campestre, en la que todo se hacía a mano, los inmigrantes italianos, totalmente desprovistos de bienes materiales, trajeron al Distrito de São Pedro la riqueza de sus valores culturales, expresados a través de la religiosidad, el trabajo y la valoración de la familia.
Caminhos de Pedra rescatan la herencia cultural recibida de los inmigrantes italianos, constituyéndose un verdadero museo vivo
Hoy, los Caminhos de Pedra rescatan la herencia cultural recibida de los inmigrantes italianos, constituyéndose un verdadero museo vivo, donde los descendientes de esos inmigrantes reciben al visitante y le muestran la autenticidad y originalidad de su cultura, gastronomía y arquitectura.
Para comprender mejor este itinerario es necesario estar acompañado de un guía de turismo.
Tasas de visita se cobran en el local y/o en la administración de las agencias y operadoras de turismo.
Campos do Jordão, a Suíça Brasileira
En la Sierra de Mantiqueira, a 170 kilómetros de la ciudad de São Paulo y aproximadamente a 1700 metros de altura, se encuentra Campos do Jordão, la ciudad más alta de Brasil y la más fría, ya que está entre las montañas.
La arquitectura de los edificios está inspirada en el estilo suizo, característico de las construcciones con techos agudos y caídas abruptas. El famoso centro de Capivari concentra excelentes hoteles, restaurantes, confiterías y centros comerciales. A su alrededor, las lujosas residencias recuerdan a los chalets e imponentes palacetes de estilo normando.
El clima frío y el aire puro de la Sierra se comparan con los de Davos Platz, en los Alpes suizos, y los de Chamonix, la famosa estación francesa. Pero Campos do Jordão tiene incluso más ventajas que las otras estaciones climáticas europeas debido a que su clima tropical de montaña hace que el sol esté presente casi todo el año.
En invierno, la ciudad bulle de gente durante el tradicional Festival Internacional de Invierno, uno de los festivales de música clásica más importantes de Brasil y América Latina.
Misas entonadas en cantos gregorianos se presentan en el Monasterio de las Monjas Benedictinas de São João, abierto diariamente a visitas. Allí puede disfrutar de la paz de los hermosos jardines para un momento de meditación.
El Palacio de Boa Vista, edificio tradicional de Campos do Jordão, alberga hoy una importante centro cultural de la ciudad.
La naturaleza que enmarca la ciudad es un espectáculo aparte y ofrece agradables paseos, como la visita al Horto Florestal, el sendero a la Cachoeira Garalhada, la práctica de arborismo en el Parque de los Lagos y la contemplación en el maravilloso Parque Amantikir.
Petrópolis, ciudad imperial
Don Pedro II fundó la ciudad en 1843, quien, junto a toda su corte, se mudaría a la ciudad transformándola en la capital del Imperio Brasileño durante todos los veranos hasta 1889. El lugar pasaría a ser residencia de emperadores, presidentes, diplomáticos, intelectuales y artistas; debido también a su cercanía (68km) con la metrópoli Río de Janeiro.
En la ciudad se puede visitar el Museo Imperial, en donde jardines, salones y colecciones forman parte del palacio en estilo neoclásico. De igual manera, se puede conocer la cervecería Bohemia, la cual es la fábrica más antigua de Brasil. Fundada en 1853 y con más de 20 ambientes, proporciona un viaje interactivo a través de la evolución de la cerveza a lo largo de los siglos; siendo un lugar indispensable por conocer para las personas con gusto por la historia de las bebidas.
Para los conocedores de lo artístico, puede visitar la catedral de Sao Pedro de Alcántara, una construcción neogótica francesa, en la que se encuentra el mausoleo donde descansan los restos de la familia imperial; y en donde también pueden verse esculturas, vidrios y pinturas de artistas reconocidos como Jean Magrou, Bertozzi, y Carlos Oswald. En esa misma línea, una construcción histórica adicional por descubrir es el Palacio de Cristal. En él, en una fiesta de abril de 1888, y con la presencia de la princesa Elizabeth, fueron liberados los últimos esclavos en Petrópolis.
Finalmente, el distrito de Itaipava en Petrópolis, se destaca por su tradición gastronómica, su comercio exclusivo y su naturaleza. Las atracciones de este lugar incluyen un parque municipal cercado por la Selva Atlántica y un valle donde los bares y restaurantes gourmets son lugares que vale la pena visitar.
A 68 km de la ciudad de Río de Janeiro, en la parte alta de la Sierra da Estrela, es uno de los refugios preferidos de los cariocas: Petrópolis.
Don Pedro II fundó la ciudad, Petrópolis en 1843, quien, la transformó en la capital del Imperio Brasileño durante todos los veranos hasta 1889
Se dice que a D. Pedro II le encantaba el clima templado de Petrópolis. Tanto que mandó construir allí un palacio para que fuera la residencia de verano de la familia imperial.
De ahí surgió el nombre que se le dio a la ciudad, de la unión de las palabras Petro (Pedro) y Polis (ciudad). Desde entonces, la región ganó notoriedad y comenzó a desarrollar infraestructura para recibir a jefes de estado, ministros y nobles. Considerado como una atracción turística imperdible de la ciudad, el Palacio Imperial fue transformado en el rico Museo.
No se puede dejar el centro de la ciudad sin antes visitar el Palacio Río Negro, dedicado a la memoria de la República en la antigua ciudad imperial, y el Palacio de Cristal, donde fueron liberados los últimos esclavos de Petrópolis. Este último es actualmente un lugar de eventos culturales y diferentes exposiciones.
Otro punto destacado de Petrópolis es la Catedral de San Pedro de Alcántara, que alberga un mausoleo con los restos de D. Pedro II y Doña Teresa Cristina. Además de estos lugares, agregue a su recorrido el Museo Casa de Santos Dumont, un sitio dedicado a la historia de la aviación, y la visita guiada a través del Centro de Experiencia Cervecera.
Los distritos de Petrópolis reúnen talleres de artistas, anticuarios y tiendas de objetos de arte. La región también ofrece incontables opciones para la práctica de modalidades deportiva integradas con la naturaleza, como la escalada, cabalgatas y senderismo.
Hermosas y lujosas posadas lo están esperando para que disfrute del patrimonio cultural, la naturaleza exuberante de la Mata Atlántica y los galardonados restaurantes de la región serrana de Petrópolis.