Las “Gordibuenas” en contraposición a los “Fofisanos”…
Va a ser que no o sí, en estos temas nunca se sabe… De todos modos si decimos “fofisanos”, nos critican, o los critican… y los llaman gordos bebedores de cerveza… ¿envidia?...
Pero si decimos “gordibuenas”… como la segunda parte del término es “buena”, es como un halago, que lo es…
Que conste que estoy en esa onda, una gordibuena es una mujer que está guapa aunque esté “gordita” o “rellenita” o “proporcionadita”, ¿por qué no?
Pero ese término, que es un invento de hoy, el hecho no es de hoy, es, cuanto menos, de ayer y hasta de antes de ayer, como poco…
Porque ¿quién no ha tenido una amiga así, de esas que se llaman “hermosas”?, y para muchos hombres, mujeres y viceversa… la carne, en este caso la carnalidad les gustaba o les ponía, según el estado de “ánimo”…
Y, mira por donde, ¿por dónde?, es un modo de hablar, tranquilos, el listo o la lista de turno se cree que ha descubierto la pólvora y la único que ha hecho es cambiar la mirada y ser más “amplio” de miras… nunca mejor dicho…
Vamos a ver, o a mirar, Rubens no es un pintor de ahora y las mujeres que representaba eran mujeres hermosas, sensuales y carnales ¿o no? ¿Eran o no eran gordibuenas “las tres gracias”, sus Venus y otras más?
Y hoy en día, hasta en las pasarelas aparece la talla XL y XXL, ahí tenemos a Kate Upton, modelo y actriz, que se considera “strong, not skinny” (fuerte, no flaca), a Meghan Trainor, cantante y productora, cuyo lema es “siéntete bien contigo misma”…
Y así podríamos seguir poniendo ejemplos, pero como se dice, para muestra ya valen dos botones… eso sí, dos hermosos botones…
Pero, ahora a estas Gordibuenas se las denominan “mujeres reales”, cuando las mujeres reales son todas, a ver si por huir de las mujeres talla cero caemos en el otro extremo y vamos a considerar normales ciertas pautas que no lo son ( y creo que nos entendemos)… Al fin y al cabo, el concepto de “gordibuenas” (que por otro lado me encanta) nos lo están colando desde Hollywood y alrededores, o mejor dicho, lo están “alimentando” desde allí, porque han visto que ahí había negocio, y todo lo que sea susceptible de ser negocio se termina asumiendo por la industria y el capital, aunque haya nacido como una forma de disconformidad… pero business is business…
Porque lo que empezó siendo un término de algún modo liberador para las mujeres, como es la gordibuena, se ha convertido en una “marca” para promocionar y abrir otro nicho de mercado… y así podemos ver como en artículos o reportajes en los que se alaba y se defiende ese término y esas mujeres, la publicidad de moda y de ropa que alberga y rodea tiene modelos “escurridas”, ¿una contradicción? No, una hipocresía de las propias tendencias…
Pero, a lo que vamos, que para eso estamos: ¡Bienvenidas sean los Gordibuenas!
¡Maldito concepto!
Luego está otro término que, en principio, puede tener mucho en común con las gordibuenas, pero es, en muchos casos, más artificial que natural ¿o sería más exacto real? (en muchos casos), las “culoréxicas”…
No Tengo Un Culo Gordo, “Soy Culoréxica”…
Hay modos y modos de decir a llamar a las cosas, menos por su nombre…
Y en estos tiempos se juega y se inventa lenguaje para ser políticamente correctos y mentalmente básicos…
Las palabras se manipulan y retuercen hasta que expresen lo que queremos que digan sin llegar a decirlo. Así se ponen de moda palabros más o menos raros o curiosos, cuando no simplemente tontos, anglicismos, francesismos, latinismos y otros ismos más o menos ismos e inventados…
Así, se ha llegado a la “culorexia”, tal como suena (o sueñan algún@s) que aunque suena contundente, no lo es tanto como culona, así culorexia viene a ser la obsesión por poseer un culo potente (muy potente), redondo (muy redondo) y respingón (muy respingón…
Un ejemplo, ¡Sí!, esa mujer en quienes todos estamos pensando: Kim Kardashian…
Y sin llegar a ese extremo: Jennifer López…
¿Entendido? Pues es una moda y su avance, nunca mejor dicho, aunque sea trasero, es imparable…
Y si la culorérica no tiene el tamaño que desea (un XXL por lo menos) la cirugía estética puede ir en su ayuda con los rellenos correspondientes…
¿Estamos tantos o muy tontos?
Y un último apunte, en el colmo de la tontería, o de la culorexia, las dos mencionadas antes, Kim y Jennifer andan a la greña por ser las precursoras (o promotoras) del ¿invento?, y aseguran, tanto la una como la otra, que han sido las primeras, una lo dice, la otra lo rebate, pongan el nombre en el orden que quieran…
Mientras tanto, que le pregunten a Kayne West por la que le gusta más… Seguro que lo tiene claro…
Pues nada, besitos culones y hermosos para tod@s