Los próximos días 11, 12 y 13 de diciembre se celebrará en Madrid Expocómic 2015 (XVIII Salón Internacional del Tebeo de Madrid). Por tres días se desata la locura comiquera y todo aquel que quiera ver, tocar, comprar, vender y demás relacionado con, el llamado, noveno arte, tiene que acudir…
De todo esto, Expocomic, Expomanga y más temas relacionadas con este mundo, hemos hablado con su director y cabeza visible, Emilio Gonzalo…
Eres asesor fiscal y te metiste en la aventura del Expocomic y el Expomanga.
-Al final creo que es al revés, empecé primero con los cómics, cuando éramos muy chavales, cuando empezamos a leer y empezamos incluso a dibujar y a medio editar fanzines, teníamos 14, 16 o 18 años y luego cuando vas a la facultad, en lugar de tirar por la rama de Bellas Artes, que era lo que tenía que haber hecho, porque en aquella época dibujaba y lo siempre me ha gustado, dije “en mi familia hace falta dinerito”, me metí en la parte de Economía y terminé de asesor fiscal, pero nunca dejé de leer tebeos y cuando el mundo del cómic estaba en ese vacío, que el Salón del Cómic no tiraba, metí un poco la cabeza y cometí la locura de meterme en esto y ahora le dedico más tiempo casi al mundo del cómic que a ser asesor fiscal.
Pero sigues siendo asesor fiscal
-Sigo siendo asesor fiscal, porque es lo que me da de comer y lo que paga las facturas es la Asesoría Fiscal y luego mi tiempo libre lo dedico al cómic y le voy arañando tiempo a la Asesoría Fiscal.
¿Cómo se consigue sacar adelante una cosa como el Expocomic que se está saliendo de madre por el tamaño y del Expomanga, qué vamos a decir?
-Al final ha sido el trabajo de muchos años y mucha gente, porque yo puedo ser la cabeza visible en algún momento, pero en realidad es mucha gente la que tiene ganas de ayudar, de colaborar y aunque no sea cómo lo hacemos nosotros, el cogollo central de la organización que somos cuatro o cinco, pero sigue siendo mucha gente que nos echan una mano… los editores nos echan una mano tremenda, los dibujantes ni te cuento, porque su colaboración es básica para nosotros, no son colaboradores, son amigos, siempre estoy con alguno, si no es Nacho Herranz, es Carlos Giménez, con Azpiri, con cualquiera de los grandes dibujantes, porque han visto que nosotros lo planteamos como un momento de diversión, hacer un evento para el aficionado, no para ganar dinero, gracias a que eso nos lo permitía que sea asesor fiscal, otros compañeros son periodistas, profesores, otros tienen una librería, cada uno vivimos de nuestro trabajo por otro lado, entonces podemos dedicar a esto tiempo y cariño, que podemos quedar el sábado por la noche, pues el sábado por la noche, para que todo el mundo tenga una idea, nos solemos reunir los viernes por la tarde, cuando la gente no trabaja, nos juntamos para trabajar en esto… Esto es cuestión de afición pura y dura.
¿Por cuál te decantas más de estos dos eventos?
-Es curioso, toda la vida he sido más de Expocómic porque me gustaba más el cómic social y otro tipo de cómic, pero con el manga me ido entrando el gusanillo y la verdad es que tiene casi vida propia, he descubierto que la gente se divierte mucho más y lo pasa mucho mejor en el Expomanga que en Expocómic.
Es que me parece que el Expomanga es más lúdico
-Es una feria de entretenimiento y aunque las bases y los pilares es una cuestión cultural, al final hemos ido a una feria de ocio puro y duro. Nosotros hacemos mucho hincapié en toda la cultura japonesa, no solo el manga y el anime, porque al final la gente quiere divertirse y nos hacen propuestas superlocas y nosotros a raíz de eso nos volvemos más locos todavía y lo que hacemos es trabajar mucho en que la gente se divierta y el resultado es que todos los años crecemos como mínimo el 10%. Mientras el Expocómic va más despacio, seguimos creciendo, pero más despacio. Sin embargo Expocómic tiene un prestigio a nivel internacional buenísimo, todos los autores que vienen invitados luego hablan maravillas, los autores extranjeros que han hablado con esos invitados, no nos ponen ningún problema a la hora de venir, de hecho muchos se ofrecen, la verdad es que es muy gratificante, uno porque tienes al público muy contento, la gente se lo pasa muy bien y se acercan a felicitarnos y la otra porque a nivel profesional todo el sector está muy contento y vamos avanzando, pero no vamos a parar.
Eso espero. ¿Es más difícil traer invitados a Expocómic o a Expomanga?
-Sin ninguna duda es mucho más difícil traerlos a Expomanga, los autores japoneses tienen un ritmo de trabajo frenético, trabajan en equipo en la mayoría de los casos y si es un autor de éxito tiene unos plazos de entrega de mucha producción en poco tiempo y como además eso les reporta una cantidad de beneficios monstruosa, muchos de los dibujantes de manga son millonarios, y claro, si cortan sus entregas la editorial los machaca entonces el equipo de trabajo tiene que seguir funcionando y nosotros los invitamos con más de un año de antelación, siempre con el contacto de la Embajada, que Marc Bernabé nos hace un poco de gancho, las editoriales tanto nacionales como internacionales, es un proceso muy complicado, muy laborioso y los autores vienen el tiempo justo y sin despistarlos demasiado…
Por cierto, una de las labores de Expomanga y que la Embajada nos ha dicho que adelante y nos ha echado una mano muy importante este año y el que viene haremos más hincapié, es en el proceso de facilitar que algunos estudiantes españoles se vayan a Japón para perfeccionar el idioma y creo que el año que viene podremos presentar algún proyecto interesante y que económicamente sea asequible para que los chavales que tengan mucho interés en la cultura japonesa y en aprender japonés bien, puedan irse allí a unas residencias un poco más aceptables de dinero y que tengan el apoyo del Ministerio de Cultura de aquí y el Ministerio de Cultura de allí, para que después puedan arroparles bien y que vuelvan sabiendo.
Hablando del Ministerio de Cultura ¿Cómo trata la Administración al cómic?
-Lo trata… muy poco a poco, la verdad es que estamos pasando unos años, que quiero achacarlo a la crisis y no a los políticos, que bastante tienen con la que está cayendo, pero estamos pasando unos años complicaditos…
En general pasa al libro, los eventos culturales…
-El libro está mal, los eventos culturales están mal, estamos soportando ese 21%, los libros un poco menos, que se lleva prácticamente todos los recursos para gastos en invitados, en espacio y para actividades… Espero que tengamos algún cambio en breve, que los cambios sean a mejor, pero los políticos necesitan ponerse un poquito las pilas, al igual que nosotros estamos trabajando desde las trincheras con nuestro tiempo libre, sin ganar dinero y aportando todo nuestro esfuerzo, creo que ellos también tienen que dar un paso adelante y empezar a mojarse, es un poco triste que haya eventos culturales en Madrid, incluidos Expocómic y Expomanga, que hemos pasado momentos malísimos, ahora no es que estemos en un buen momento, digamos que podemos sobrevivir, pero hemos estado a punto de echar el cierre y decir que no podemos aguantar más y en cambio no hayamos conseguido que nuestro Ayuntamiento en el caso de Expocómic y Expomanga, nos hagan un descuento para poder acudir a sitios en que podamos dar cabida a los visitantes que tenemos, es triste decir que más del 50% del presupuesto de Expomanga se gasta en el alquiler del espacio, no digo en el montaje interior, actividades e invitados, sino en el alquiler del espacio… mucha gente cree que el Ayuntamiento o la Comunidad de Madrid nos cede gratis el espacio, pues no, estamos hablando de muchas docenas de miles de euros los que nos gastamos en esto, en espacios que son de todos los ciudadanos, creo que ahí sí que los políticos tendrían que haber hecho un pequeño esfuerzo e intentar dar facilidades…
Evidentemente el Pabellón de Cristal de la Casa de Campo se os ha quedado pequeño.
-Así es y eso que este año hemos intentado que todo fuera un poco mejor, hemos dado un poquito más de fluidez, pero el incremento de público nos ha vuelto a desbordar y hemos vuelto a insistir a la Administración que esto se nos queda pequeño, de las pocas cosas culturales que tienen éxito y no podemos crecer mucho más porque cada vez que intentamos trasladarnos a otro lugar los precios son tan desorbitados que no podemos, y entonces nos quedamos en esa situación: o la gente sufre, con lo cual nosotros sufrimos, por ejemplo este año no he disfrutado el Expomanga, porque paso más tiempo en las colas discutiendo con la gente e intentando tranquilizar y además apenándome porque mi trabajo ha sido un éxito y no lo puedes disfrutar, tendría que estar dentro del salón, disfrutando del público, de los invitados, de ver, disfrutar… me parece que es triste, porque los eventos culturales estamos perdiendo fuelle y el ánimo, estamos esperando que nos dejen los espacios grandes. Ifema tiene pabellones que a veces están vacíos, que nos hagan un descuento portentoso, que podamos trasladarnos allí y le demos más vida, o que el propio recinto de la Casa de Campo, que es un entorno estupendo, se ajuste a las circunstancias, porque parece un poco increíble que los controles de aforo sean diferentes en unas instalaciones que en otras, que nosotros tengamos una persona por cada dos metros cuadrados y que en un concierto haya 4 personas por metro cuadrado, son ocho veces más, creo que la gente del cómic y del mundo de la cultura es lo suficiente pacífica y lo ha demostrado en esos 18 años sin ningún altercado, que podemos estar perfectamente una persona por metro cuadrado, no pido cuatro, y así habríamos tenido cabida perfectamente en el Pabellón de Cristal, porque estamos utilizando más de 13.000 metros cuadrados, no habría habido colas, no habría existido esperas, alguna lipotimia… creo que este tipo de problemas se evitarían ajustando un poco la legislación, tomando a cada evento en sí mismo y podríamos llegar a una solución.
¿Cómo está de autores el cómic en España?
-De autores está muy bien. Somos una potencia internacional sin ninguna duda, de hecho en Marvel, en DC y las editoriales franco-belgas están tirando de España, porque tenemos una cantera de genios tremenda, eso es más que evidente, creo que nadie lo discute, y los premios Eisner y las series punteras están en manos de los españoles. La industria editorial está un poquito peor porque aquí no se vende, porque el ciudadano no tiene dinero, los precios son caros, entonces no se puede consumir, esto en un bucle…, tenemos una parte muy importante del sector, que es el origen de todo y es maravilloso y creo que es una pena que algunos de ellos, en algún momento de su vida laboral, cambien y se decanten por otros sectores, cuando si hay un sector editorial poderoso y potente…
Así es, porque muchos de los dibujantes, por ejemplo, de la época de El Vibora, se han terminado dedicando a la publicidad, al diseño…
-Claro, no solamente la gente de El Víbora, sino toda aquella gente que estaba en El Cairo, Cimoc, Zona 84, casi todos, no solamente los underground, casi todos los dibujantes prácticamente han tenido que decantarse por el mundo de la publicidad en muchos casos y la ilustración pura y dura en otros. Hay muchos que están en prensa, se han perdido grandes autores de comic, como Federico del Barrio, Raul…. Y piensas que triste que no podamos disfrutar de esos comics… Santiago Sequeiros está en la costa dibujando ilustraciones para varios periódicos nacionales, sin embargo seguimos esperando su gran obra el “Romeo muerto”, que espero que esté en 2016 en la calle… una lástima… lo tienen que dejar como un trabajo de afición, personal, no cobrar por ello y eso me parece triste. Tenemos grandes figuras que no están acompañados por el sector, ni siquiera por el ciudadano, porque las ventas como los precios no acompañan, son casi insalvables. Incluso yo mismo muchas veces me cuestiono que puedo y que no puedo comprar. Te pones delante de un kiosco, con la gran cantidad de novedades que hay y dices “esto es muy complicado”, hay que tener un presupuesto de varios cientos de euros para comprar lo que te apetecería comprar…
La gente joven no tiene poder adquisitivo…
-Ni la gente joven ni la gente mayor…
Pero la gente joven es el futuro del mercado…
-Son la cantera que todos deseamos, lo que no quiere decir, por ejemplo, es que el público de Expocómic va envejeciendo, que sí, que está ocurriendo, al contrario que es en Expomanga, que ese es uno de los éxitos de Expomanga, el público no envejece, sino que sigue adelante, sigue implicándose y consumiendo, sin embargo, en el cómic la cosa está más complicada, estamos perdiendo clientela…
¿Cómic de adultos o cómic de niños?
-Y por qué hay que ser excluyente, creo que cómic de adulto, de niños, de mayores de jóvenes, para calvos, para melenudos, para altos, para bajos…
¿Cómic o tebeo, cuál sería el término más adecuado?
-A mí el término que más me gusta es tebeo, cómic es un término muy bonito que hace que sea fácil para la gente y es muy americano, pero realmente el soporte de la historieta, el medio en que nosotros queremos movernos, el noveno arte y así lo llamamos y así se reconoce, la historieta en soporte físico es el tebeo, no solamente el T.B.O. de 1917, es nuestra palabra, es muy española, la hemos apartado un poco porque la identificamos con el tebeo un poco rancio de principio de siglo XX, o con el tebeo infantil, pero no tenemos que apartarlo, que a la gente le gusta más novela gráfica…
Ese término, novela gráfica…
-Llamémoslo como queramos, pero consumamos y dejemos de tenerlo vetado…
El otro día hablando sobre estos términos, un gran consumidor de novela gráfica me decía que la diferencia entre comic y la novela gráfica es el tamaño y el volumen, y él sólo consumía novela gráfica…
-Sobre esto, siempre que hay algún evento del mundo cómic o en una cena, nos encontramos gentes del sector, siempre pasa la mismo, no tenemos claro cómo definir que es novela gráfica y que no lo es, parece que la definición seria ese formato de más de 250 páginas, tamaño cercano al libro de literatura normal. Creo que ha sido una estrategia editorial para colocarnos en las mismas estanterías de la literatura habitual en las librerías generalistas, era una asignatura pendiente, el cómic estaba predestinado a estar en los kioscos o en las librerías especializadas y como no conseguíamos entrar, los editores se plantearon sacar ese formato para llegar a las librerías y ver si así se vendía. Y parece que es verdad, sí que se está comprando novela gráfica, pero no hay razones para no llevar a las librerías el cómic franco-belga, ni el cómic-book americano, que no es novela gráfica, aunque al final todo es lo mismo, son historietas, con sus viñetas, sus bocadillos, sus dibujos, un principio y un fin, me parece que todo son lo mismo y no creo que podamos definir novela gráfica, como hay gente que quiere definirla porque tratas temas sociales o un poco más sesudos y cualquier cómic o cualquier tebeo de 32 páginas puede tener el mismo texto, de hecho si nos remontamos a los años 80, la gente de Zona 84, Cairo… de todas esas revistas, contaban una historia perfecta y completa en 8 o 16 páginas, entonces no hacen falta 250 páginas, que en algunas ocasiones son necesarias, me parece perfecto, pero no podemos dejar de la mano grandes artistas que en 16 páginas nos cuentan una historia bellísima, perfectamente dibujada y perfectamente narrada, creo que todo tiene cabida, en el cine no abandonamos los cortos porque todas las pelis tenga que durar cuatro horas, como puede ser El Señor de los Anillos… tenemos que dar cabida a todos.
¿Expocómic o Expomanga se pueden exportar?
-Supongo que sí.
¿Lo habéis intentado?
-No, no lo hemos intentado pero si lo han intentado. Hemos tenido algún intento de alguna empresa internacional para llevarlo fuera de nuestras fronteras… vienen hablan con nosotros, están observando cómo lo hacemos… parece que es un formato exportable.
Acerca de AEAC
La Asociación Española de Amigos del Cómic es una organización sin ánimo de lucro compuesta por amantes del noveno arte. Su principal pretensión es fomentar la percepción del tebeo como otra forma de expresión cultural, motivo por el que se encarga cada año de organizar dos de los principales eventos del sector en España, Expocómic y Expomanga. Además, AEAC también participa activamente en actos solidarios como la recogida de libros y tebeos para colaborar en la construcción de bibliotecas y la alfabetización de países del Tercer Mundo.
Acerca de Expocómic
Desde 1998, el Salón Internacional del Tebeo de Madrid busca ser un lugar de encuentro donde la pasión de los aficionados al cómic de la capital española se desata durante cuatro días en los que pueden compartir su afición, completar sus colecciones, conversar con sus autores favoritos, disfrutar de las mejores exposiciones y un amplio etcétera de actividades dispuestas para que el noveno arte sea considerado definitivamente como una forma totalmente válida de expresión cultural. A lo largo de este tiempo, grandes nombres han visitado Expocómic, figuras entre las que cabría destacar a Tim Sale, Neal Adams, Mark Buckingham, Howard Chaykin o Lewis Trondheim, entre tantos otros, a los que hay que unir leyendas patrias como Alfonso Azpiri, Carlos Giménez o Carlos Pacheco.