La capital húngara propone una amplia agenda de propuestas primaverales y los lugares más recomendados para disfrutar de este espectáculo natural, con el Jardín Botánico Füvészkert como protagonista.
Budapest se prepara para uno de los eventos más esperados del año: el Festival del Cerezo en Flor en el Jardín Botánico Füvészkert. Este festival tiene su origen en Japón, donde se celebra, cada año, la llegada de la primavera y el florecimiento de los cerezos. La tradición se ha extendido a diferentes partes del mundo y Budapest se ha convertido en uno de los destinos más populares para disfrutar de este espectáculo de la naturaleza, con actividades para toda la familia y un ambiente festivo en cada rincón.
Este festival es una oportunidad única para sumergirse en la cultura japonesa y disfrutar de la belleza de los cerezos en flor en la ciudad húngara. Durante el mes de abril, los visitantes pueden disfrutar de una amplia variedad de actividades organizadas por el Jardín Botánico Füvészkert. Entre las propuestas, destacan los talleres de ikebana (nombre japonés utilizado para referirse a los arreglos florales), las ceremonias del té y de la espada, así como conciertos de música tradicional japonesa. Asimismo, los asistentes pueden degustar la gastronomía japonesa y comprar artesanías.
Además, este jardín botánico es el lugar perfecto para admirar los cerezos en su máximo esplendor. Cuenta con una gran variedad de especies de cerezos japoneses y europeos, que florecen en diferentes momentos del año. El jardín también ofrece visitas guiadas y talleres para aprender sobre la cultura japonesa y la importancia de los cerezos en Japón.
Los rincones secretos de la ciudad para disfrutar de los cerezos en flor
El Jardín Botánico Füvészkert no es el único lugar para disfrutar del florecimiento de los cerezos. Budapest cuenta con rincones especiales donde disfrutar de este fenómeno natural. Uno de ellos es el Parque de la Ciudad, donde se encuentra el famoso lago Városligeti, rodeado de árboles de cerezo.
Otro lugar recomendado para poder ver este espectáculo de color es el paseo Árpád Tóth. Se trata de la ruta de senderismo más atractiva del Barrio del Castillo, parte del Paseo de Bástya que discurre a lo largo de la muralla del castillo. Fue nombrado en 1946 por el poeta que solía vivir cerca. Se encuentra en la parte de Várnegyed frente a Attila út, un extremo del cual es el bastión de Anjou y el otro la rondella de Fehérvár. El paseo se creó a principios del siglo XVIII, cuando se llamó Langen Wand (camino largo). La doble hilera de árboles se instaló en la década de 1720 y en la actualidad los cerezos ornamentales que florecen espléndidamente en primavera se han convertido casi en un lugar de peregrinación para los paseantes.
Isla Margarita es una isla situada en medio del río Danubio y representa una localización ideal para disfrutar de los cerezos en flor mientras se pasea por sus jardines y senderos ya que en la isla se encuentra el Jardín Japonés, un lugar especialmente diseñado para la contemplación y meditación rodeado de la belleza de los cerezos en flor.
Una última recomendación para disfrutar de los cerezos en flor en Budapest es el Parque Tabán. Situado en el barrio de Buda, este parque es un oasis de tranquilidad en medio de la ciudad. Con una gran cantidad de cerezos en flor y vistas panorámicas de la ciudad, el Parque Tabán es un lugar ideal para pasear y hacer, incluso, un picnic en primavera. Además, se puede disfrutar de una hermosa vista del Puente de las Cadenas, uno de los monumentos más emblemáticos de la capital. El parque cuenta también con un pequeño lago perfecto para relajarse y disfrutar de la belleza natural.
En definitiva, la primavera es una época maravillosa para conocer Budapest y disfrutar de sus calles y atractivos. El buen tiempo y el florecimiento de los numerosos y representativos cerezos de la ciudad son un aliciente más sumado a las infinitas opciones artísticas y culturales que ofrece la capital húngara.