Con sus brillantes aguas turquesas, sus playas de arena dorada y sus calles vibrantes y repletas de música y arte, la isla de Puerto Rico es la joya oculta del Caribe y es el lugar perfecto para escaparse y divertirse al sol en invierno. La colorida capital de Puerto Rico, San Juan, es conocida por su encanto, en el que se mezclan en partes iguales su arquitectura colonial, su animada vida nocturna y su sabor local. Se trata de la segunda ciudad más antigua fundada por los europeos en las Américas, y es el corazón palpitante de la historia y la cultura de la isla. Un lugar en el que los visitantes pueden explorar los tesoros de esta ciudad colonial y a la vez cosmopolita.
¿Qué hacer?
Castillo San Felipe del Morro en el Viejo San Juan
El Castillo San Felipe del Morro, conocido localmente como "El Morro", es una ciudadela del siglo XVI fundada en 1521 por colonos españoles. Su trazado es un laberinto de cuarteles, túneles, mazmorras y bóvedas que invitan a ser explorados. Situada en el extremo noroeste del Viejo San Juan, esta fortaleza fue declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 1983, y cuenta con una apasionante historia, lo que la convierte en uno de los lugares más significativos del hemisferio occidental. Al acceder a través de sus puertas, los viajeros se verán transportados cinco siglos atrás y tendrán la oportunidad de conocer la importancia del lugar en la conquista del Nuevo Mundo y cómo Estados Unidos utilizó el fuerte durante las dos guerras mundiales. Hoy en día, El Morro da la bienvenida a los cruceros que entran y salen de la bahía y es uno de los lugares más pintorescos del Caribe.
Paseo al atardecer y tour de degustación
Disfrutar de la fascinante historia de la capital, del encanto de la arquitectura colonial en tonalidades pastel paso a paso y bocado a bocado en la excursión a pie y con degustación de Spoon's Sunset es la mejor manera de explorar la ciudad y apreciar los sabores boricuas de Puerto Rico. Boricua es un nombre único que honra la herencia isleña de Puerto Rico, pero también es una forma de vida, un estado de ánimo, un ritmo y un sabor que son distintivos de Puerto Rico. Los viajeros pueden pasear a un ritmo relajado por las históricas calles empedradas, visitando restaurantes locales para probar la comida puertorriqueña tradicional y moderna. Igualmente, podrán degustar deliciosos sabores locales mientras conocen las raíces taínas, españolas y africanas de la isla, y podrán disfrutar de productos básicos puertorriqueños como el cerdo asado sazonado, el café local y el pescado fresco. A lo largo del recorrido, los viajeros podrán ver los lugares más emblemáticos de San Juan, como la segunda catedral más antigua de América, un convento centenario y la Plaza de Armas.
Las playas de arena dorada de San Juan
Para huir del bullicio de las animadas calles de San Juan y relajarse, los viajeros pueden dirigirse a algunas de las playas más populares y pintorescas de la isla, situadas en la misma ciudad. Para disfrutar del sabor de Miami en Puerto Rico, la playa del Condado, en el moderno barrio del Condado de San Juan, es una franja de arena dorada bordeada de palmeras, respaldada por un animado barrio lleno de tiendas y restaurantes. Para los aventureros, El Escambrón es una playa metropolitana con bandera azul, protegida por arrecifes de coral que la convierten en el lugar ideal para practicar esnórquel y explorar la vida marina de la isla, mientras que la playa de Ocean Park cuenta con olas azules y cristalinas de tamaño medio, una opción que hará emocionar a surfistas y aficionados por igual.
¿Dónde comer?
Restaurante 1919
Situado en el hotel Condado Vanderbilt, el Restaurante 1919 es dirigido por Juan José Cuevas, chef galardonado por la guía Michelin, quien lleva a los clientes a un viaje por la exquisita gastronomía boricua. El restaurante, que combina la conciencia social con la elegancia de la cocina, tiene como objetivo apoyar a las empresas locales y sirve delicias frescas seleccionando a mano ingredientes artesanales y de producción local. Entretejiendo el carácter vibrante y experimental de Puerto Rico, el menú sirve una serie de deliciosas combinaciones de sabores. Desde una ensalada fresca hecha con remolacha, sandía y shishito, hasta raviolis rellenos de acelga local y un cochinillo aterciopelado: el menú satisfará todas las papilas gustativas.
La Casita Blanca
La Casita Blanca es uno de los lugares más auténticos y tradicionales de la región de San Juan. Con un entorno delicioso de la vieja escuela en Santurce, el restaurante garantiza la satisfacción del paladar y el calor del alma. Cada día, se selecciona cuidadosamente una lista de 10 a 12 platos puertorriqueños que incluyen sabrosas delicias como la ternera guisada con arroz, el bacalao y el puré de tubérculos y el gazpacho de cangrejo, ¡un verdadero placer!
Marmelade
Fusionando la cocina contemporánea francesa, caribeña y española con técnicas eclécticas, Marmalade es uno de los destinos culinarios más emocionantes de Puerto Rico. El chef Peter Schintler desafía las tendencias de la cocina con una nueva visión de lo que puede ser un restaurante, trabajando con los agricultores puertorriqueños para aprovechar los productos locales de forma sostenible. Los viajeros pueden ponerse en manos del chef con un menú de degustación o construir su propio festín a partir del menú a la carta, con maridaje de vinos de la bien surtida y variada bodega de Marmalade.
¿Dónde alojarse?
Dorado Beach, A Ritz-Carlton Reserve
Enclavado en la exuberante y lujosa costa de Puerto Rico, en 50 acres de la finca Rockefeller, Dorado Beach, A Ritz-Carlton Reserve es un refugio íntimo, impregnado de referencias del paisaje natural circundante y de la diversa cultura. Combinando la majestuosidad de su entorno natural y la riqueza de su herencia de 50 años, el complejo es un santuario verdaderamente lujoso diseñado para atraer a los viajeros más exigentes del mundo. La Reserva cuenta con un impresionante campo de golf y un centro de fitness, junto con una selección de cuatro restaurantes de primera clase donde los huéspedes pueden relajarse y disfrutar de una culminación de sabores y técnicas culinarias caribeñas e internacionales. A solo 15 minutos del centro cosmopolita y de la vida nocturna de San Juan, la Reserva está perfectamente situada para los huéspedes que buscan combinar la vibrante oferta cultural de la ciudad con la comodidad del aislamiento.
Mood Haus
Si la cultura vibrante y artística de Puerto Rico tomara la forma de un hotel, sería Mood Haus. Se trata de un hotel boutique ecléctico, inspirado en los años 70, situado en el corazón del Distrito de Arte y Gastronomía de San Juan. Mood Haus es un país de las maravillas con una decoración de inspiración retro, bolas de espejos brillantes y ritmos de discoteca, escondido en el centro de Puerto Rico. La propiedad consta de cuatro unidades, dos estudios, un apartamento de un dormitorio y otro de dos dormitorios, cada uno con el nombre de una emblemática Diva de la Discoteca y equipado con su propia bola de discoteca, tocadiscos y una amplia colección de vinilos. Proyectado como un refugio donde sumergirse en un centro de arte, cultura y música, Mood Haus es el destino perfecto para viajeros y parejas que buscan una experiencia única y fuera de lo común, y un centro animado, donde pueden conocer y celebrar con personas que comparten sus pasiones por la vida, la música y la identidad.
Condado Ocean Club
Para los que buscan un ambiente social y sexy, Condado Ocean Club es el lugar ideal. Es un juguetón y elegante hotel boutique con una casa de playa de tonos tropicales azul y verde cristalino. A pocos pasos del Océano Atlántico y de sus emblemáticas playas, Condado Ocean Club está situado en el céntrico barrio de moda de Condado, donde se encuentran las tiendas y los restaurantes de alta gama. La casa de playa es un moderno oasis para los viajeros urbanos en el corazón de la vibrante ciudad, y ofrece servicios de última generación, un vestíbulo de estilo atrio, tres deliciosos restaurantes y una glamurosa terraza con piscina. Los viajeros pueden tumbarse junto a la piscina infinita, digna de Instagram, tomar unas bebidas en una cabaña privada o sumergir los pies en las aguas saladas a pocos pasos.
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