El precio de la vivienda en la Región de Murcia tuvo un crecimiento interanual del 5,3% hasta alcanzar este tercer trimestre de 2022 los 1.084 euros el metro cuadrado. Son datos extraídos de un informe de Tinsa, grupo especializado en valoración de activos inmobiliarios. Estos indicadores son consecuencia del aumento de la demanda. Los expertos vaticinan que esta tendencia se mantendrá en 2023 a pesar de la incertidumbre económica, o precisamente como consecuencia de ella: “Una propiedad siempre es un refugio de los inversores frente a la inflación”, asegura Manolo López, profesional con más de 30 años de experiencia en el mercado de segundas residencias y responsable del equipo de ventas de La Manga Club Properties, una de las promotoras más exclusivas de Murcia.
En La Manga Club, donde la empresa que dirige López concentra su desarrollo, el precio medio por metro cuadrado triplica o cuadriplica el valor medio fijado por TINSA para la comunidad autónoma, oscilando entre los 3.000 y 4.500€/m2, un precio que sigue siendo competitivo en el segmento de lujo.
López cree que esto también juega a favor de la Costa Cálida porque “hay una larga tradición de acogida al turista residencial atraído por el clima, las buenas comunicaciones y excelentes servicios. Aun teniendo los mismos estándares de calidad, con oferta inmobiliaria exclusiva y sostenible, los precios son más competitivos que en otras regiones mediterráneas como las Islas Baleares o la costa malagueña”, señala.
Dos de los proyectos más recientes en La Manga Club Properties son los que firma un estudio arquitectónico que pisa con fuerza en toda España y cuya esencia es la innovación y formación continua. Innov·Arq es una empresa joven fundada en Altea por Jaume Cortés y Rafa Cano, discípulos del prestigioso creador Carlos Gilardi. “Desde la etapa de formación hasta hoy, nunca hemos dejado de observar, aprender y de nutrirnos de muy distintos arquitectos, tanto nacionales como internacionales. Si bien nuestro estilo mantiene la esencia de nuestro mentor Carlos Gilardi, tenemos también otros referentes: Toyo Ito, en Japón; Álvaro Siza, en Portugal; o Fran Silvestre, en Valencia”, explica Jaime Cortés.
“Desarrollamos viviendas para personas de muy distintas nacionalidades. Esto nos ayuda a comprender los modos de vida según la cultura de origen, y las posibles relaciones entre las estancias de una vivienda. No obstante, siempre hay nexos en común, y a día de hoy resulta difícil imaginar una vivienda sin un gran espacio salón-comedor-cocina, una gran integración entre el interior-exterior, o zonas de esparcimiento y disfrute del sol, que al fin y al cabo, es algo que nos pone de acuerdo a todos”, explica. Su estudio está especializado en la construcción de viviendas unifamiliares principalmente en la Comunidad Valenciana, las Islas Baleares y la Región de Murcia, donde ha proyectado dos promociones excepcionales, los apartamentos Las Orquídeas, con precios que oscilan entre los 250.000 y los 550.000 euros y las villas Las Acacias (entre los 600.000 y los 950.000€), ambos localizados en La Manga Club.
Su estilo es sobrio, pero con una marcada esencia: “El diseño de contundentes voladizos, el empleo de la piedra en elementos singulares, jardineras como integración del verde y el edificio son algunos de los elementos más característicos y repetitivos en nuestros proyectos”, explica Cortés. “Es indudable que el teletrabajo se ha instaurado en la sociedad tras la pandemia, y entendemos como nuestra la responsabilidad el dar respuesta a esta nueva forma de vida. Nuestros proyectos en la Costa Cálida cuentan con espacios destinados al teletrabajo, grandes zonas de esparcimiento y telecomunicaciones de gran velocidad. Todas estas medidas suponen una oportunidad de crear un turismo residencial nuevo para la zona. Bajo nuestro punto de vista la Costa Cálida es un lugar idílico, muy rico en cultura e historia, con una fantástica gastronomía y con unas condiciones climáticas inmejorables”.
Este estudio asegura priorizar los elementos medioambientales más allá incluso de lo que exige la propia normativa. La sociedad es cada vez más exigente con la huella que estamos dejando en el planeta. “Desde Innov·arq tratamos de combinar un elevado confort térmico con un consumo de energía muy bajo, gracias a un cuidado diseño de los edificios y a sistemas de ventilación controlada. Incorporamos la aerotermia tanto para la producción de agua caliente sanitaria como para refrigeración y calefacción de la vivienda. Este sistema emplea una gran cantidad de energía renovable, a la par que apenas deja emisiones de CO2 en la atmósfera. El compromiso del estudio con la sostenibilidad se extiende también a los materiales empleados, mediante el uso de materiales respetuosos con el medio ambiente”.