Tras el ritual, la Cité fortificada deja una imagen todavía más mágica, poética e impresionante a sus visitantes.
Más de 700.000 personas se darán cita el próximo jueves, 14 de julio, en la bella Carcassonne para celebrar la fiesta nacional francesa y disfrutar, así, del mejor espectáculo pirotécnico del Aude y Occitania. Se trata de un emblemático ritual: La quema de la ciudad cátara. Un homenaje a ese 14 de agosto de 1898 en el que la Cité acogió a los “Cadets de Gascogne”, un grupo de destacados intelectuales del ámbito artístico, literario y político que aparece en obras tan relevantes como “Cyrano de Bergerac” o “Los tres mosqueteros”. Como cada año en esta fecha, ya entrada la noche, el cielo de la mayor ciudadela medieval fortificada que se conserva en Europa, abandona su forma habitual para llenarse de encanto y misterio.
Si ya de por sí, la Cité Patrimonio de la Unesco es una ciudad que conmueve de principio a fin, el 14 de julio las emociones se cuatriplican en cuestión de segundos. Y, de ser la ciudad fortificada más espectacular de Francia pasa a ser la más bella e increíble del mundo. Porque justo a partir de las 22.30 horas es cuando tiene lugar el apagón. El momento en el que las luces de la ciudad cesan por completo; y, en su lugar, el cielo se ilumina, sonríe y se llena de corazones, palmeras y remolinos vestidos en tonos plata, rojo topacio, azul turquesa u oro, entre muchos otros colores.
Los 600 metros de fachadas, las antiguas torres gemelas y las murallas del siglo XI son escenarios de excepción, y en los que se han dispuesto centenares de bengalas de humo rojizo que transforman por completo la ciudad feudal de los Trencavel. En el laberinto de calles adoquinadas, la fiesta sigue; y, los bailes y banquetes, los desfiles y recreaciones históricas, rinden especial homenaje a ese 14 de agosto de hace 124 años.
No perderse en Carcassonne el 14 de julio
Unas 700.000 personas acuden a Carcassonne para admirar el espectáculo.
Se recomienda llegar muy temprano, para verlo en buenas condiciones.
El espectáculo pirotécnico es visible desde las orillas del río Aude o desde los puentes que lo cruzan, situados frente la Cité.
El espectáculo es gratuito, no hay disponibilidad de gradas ni asientos.
Para fotografiar los fuegos artificiales recomendamos evitar el flash y utilizar trípode para que no salgan movidas.