Más de 75 hectáreas rodeadas de picos majestuosos y paisajes únicos, cubiertos de abetos, convierten La Pierre Saint-Martín en la joya del Pirineo Atlántico francés; que este año cumple 60 años desde que se pusieran en marcha sus dos primeros remontes en 1962. Una estación de esquí fascinante y eco-sostenible de principio a fin, y para todos, que celebra su sexta década reafirmando su compromiso inicial con la naturaleza, el medio ambiente y las personas.
Para ello, la Pierre Saint-Martin celebra su 60 aniversario con la puesta en marcha de acciones ecológicas enfocadas a la revegetación y mejora de las conexiones con el transporte público, como medida para reducir la contaminación. Gracias a la estrecha colaboración con la Oficina Nacional Forestal (ONF), la estación de esquí garantiza que sus principales áreas de biodiversidad, como son el macizo kárstico de La Pierre, no sufren los efectos de los excursionistas o esquiadores. Prueba de este compromiso, es que el resort cuenta con las certificaciones ISO 50001 y ISO14001.
Estación sin hándicaps
Para un esquí sin hándicaps, la estación de La Pierre Saint-Martin cuenta con la asociación La Pierre Handl Pyrénées que esta temporada ha puesto en marcha el Taxi-Ski. Pilotos voluntarios se ofrecen para guiar a personas con discapacidad para que disfruten de un panorama impresionante.
Esquí y yoga
Y es que si hay algo difícil de hacer en La Pierre Saint-Martin es deslizarse por las pistas sin detenerse, una vez sí y otra también, para sacar el móvil e inmortalizar cada relieve de su admirable y aclamada cordillera. No en vano, la zona de Braca convierte la estación en la meca del yoga. Ya verás cómo no te arrepientes de haber cruzado la frontera para disfrutar de la cara bonita de los Pirineos, una vez tengas la mirada puesta en los increíbles valles de Béarn, Ossau, Aspe o Barétous y, cómo no, en el País Vasco desde la indescriptible perspectiva francesa.
3 nuevas pistas esta temporada
La estación de esquí más occidental de los Pirineos es una estación de alta montaña situada a 1500 y 2200 metros sobre el nivel del mar, con un marcado carácter familiar y que cuenta con pistas panorámicas como las azules de Grands Boulevards que ofrecen un suave descenso desde 2153 a 1527 metros sobre el nivel del mar, uno de los escenarios más idílicos de los Pirineos. A las 20 pistas existentes hasta ahora, se suman tres más que representan un 15% de kilómetros adicionales. Las nuevas pistas van de azul a negro y permiten llegar a la zona de esquí de esta nueva área.
Entre otras novedades de la temporada cabe destacar el rediseño de las dos pistas de trineo que hay en el frente de nieve y en la zona nórdica de Braca. A ello cabe sumar, la instalación de un tapiz cubierte en el frente de nieve para conseguir un espacio seguro donde empezar con serenidad; la instalación del Family Park para debutantes en la pista verde de Rochers; y la instalación del snowpark “The Moonwalk”, en una pista azul accesible con telesilla desde el frente de nieve.
Black Rock, para una estancia eco e inolvidable
Ofrecido por Atipiclodge, Black Rock es un pueblo de acogedores y confortables Pods calefactados con estufa de leña. Situado a 1.800 m de altitud, Black Rock ofrece una experiencia que combina naturaleza, gran comodidad del alojamiento al aire libre y la belleza del lugar. Raquetas de nieve al atardecer entre pinos, baño nórdico, gastronomía y pernoctación son los ingredientes.
Próximos eventos
- Hasta el 28 de febrero: Yoga en la Pierre Saint-Martin. Todos los miércoles de las vacaciones escolares francesas.
- Del 21 al 22 de marzo: Frozen Rugby en la Pierre Saint-Martin. El evento de rugbi de invierno, en el que 12 equipos compiten en la nieve. Apto tanto para esquiadores como no esquiadores.
- 20 de marzo: Día de los niños tramperos en la Pierre Saint-Martin. Descubierta de las actividades nórdicas: paseo en raquetas, construcción de iglús, trineos tirados por perros y descenso en trineo.