1. Si viajas a Lisboa, súbete al mítico tranvía 28, con el que nos podemos perder por sus estrechas y empinadas callejuelas. Desde el Castillo de San Jorge hasta el Barrio Alto, su red de casi diez kilómetros permite disfrutar de los barrios más importantes de la ciudad: Graça, Mouraria, Alfama, Baixa, Chiado, Madragoa y Barrio Alto.
2. Si quieres disfrutar del legado artístico de Miguel Ángel, tu viaje imprescindible es a Roma y Florencia. Quédate embelesado por la belleza pictórica de la Capilla Sixtina o por la calidez escultórica de La Pietá en tu visita a los Museos Vaticanos y la Basílica de San Marcos.
3. Para sentirte como la auténtica princesa Sissi, nada mejor que visitar los palacios imperiales de Viena y Salzburgo, como el Palacio de Schönbrunn o el de Hofburg.
4. Si deseas descubrir una de las ciudades Patrimonio de la Humanidad más desconocidas, recorre Vilnius y sus históricas construcciones como la imponente catedral de la ciudad, de estampa neoclásica.
5. Los amantes de la literatura no se pueden perder Leipzig, la “ciudad de los libros”, debido al gran número de editoriales que tienen su sede en la ciudad.
6. Si quieres pasear por la calles de Amberes, la ciudad que vio nacer a Rubens, uno de los grandes genios de la pintura, no te puedes perder el circuito “Maravillas del Benelux y el Rhin”. .
7. Para reencontrarnos con la naturaleza, nada mejor que pasear por los senderos del Parque Nacional de Plitvice, con sus impresionantes lagos comunicados por 92 cataratas y cascadas.
8. Si queremos sentirnos como un auténtico héroe medieval, podemos viajar a Cracovia, para visitar la fortaleza de Wavel, antigua residencia de los reyes polacos, compuesta por una ciudadela, castillo florentino y catedral gótica.
9. Si quieres disfrutar del curioso “Cambio de Guardia” del Palacio de Buckingham al ritmo de la marcha militar.
10. Para ver el reloj astronómico más famoso del mundo y contemplar las mejores vista del casco antiguo de la Ciudad Vieja de Praga, viaja a la capital checa.
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