En 2016, Brasil será el escenario de otro importante evento deportivo. Se estima que alrededor de 380 mil turistas extranjeros asistan a las Olimpiadas y disfrutarán de los encantos que Brasil ofrece. Además de Río de Janeiro, sede oficial de los Juegos Olímpicos, otras cinco ciudades brasileñas servirán de escenario de este gran evento y albergarán los partidos de fútbol masculino y femenino.
Brasilia, que se encuentra entre las seleccionadas, se prepara para reforzar la promoción de la ciudad como importante destino turístico y repetir el éxito obtenido durante el Mundial de 2014. Durante aquel evento deportivo, el estadio Mané Garrincha acogió el segundo mayor número de turistas entre los estadios del Mundial y el Aeropuerto Internacional Juscelino Kubitschek obteniendo un récord en la operación de vuelos internacionales que aumentaron un 55%. Durante el periodo que abarcó el Mundial, se produjeron 870 aterrizajes y despegues, con un total de 1.66 millones de pasajeros.
Turistas durante el Mundial
Según datos de la Secretaría de Turismo del Distrito Federal (Setur-DF), Brasilia acogió a 633 mil visitantes, de los cuales más de 143 mil eran extranjeros de 87 nacionalidades distintas: el 29% eran de Colombia, el 15% de Argentina y el 10% de EE.UU.
Famosa por las curvas de cemento de Oscar Niemeyer y por el proyecto urbanístico de Lucio Costa, la ciudad de Brasilia cautivó a los asistentes al Mundial. Según datos de Setur-DF, un 93% de los turistas aprobó la ciudad y un 98% pretende regresar en otra ocasión para visitarla. La expectativa es que Brasilia cautive también a buena parte de los visitantes que vendrán para las Olimpiadas.
Por otro lado, el Mundial permitió a Brasilia demostrar que sus atractivos van más allá de ser ciudad Patrimonio Cultural de la Humanidad. Los turistas que pasaron por Brasilia se maravillaron ante la grandeza de la capital brasileña y ante la posibilidad de disfrutar del Lago Paranoá, del horizonte infinito y de un firmamento inigualable.
De hecho, uno de los éxitos fue la Torre de Televisión, que se convirtió en el punto de concentración de varios aficionados extranjeros y brasileños, antes y después de los partidos en el Mané Garrincha, y que ha albergado a más de 1,7 mil personas desde su inauguración.
Impacto económico
Los datos divulgados por la Secretaría de Turismo del Distrito Federal, demostraron que los turistas generaron un ingreso de 390 millones de euros en la economía local. Esto significa que, de media, una pareja que visitó Brasilia durante el Mundial y permaneció allí cuatro días, gastó alrededor de 1.200€ en la ciudad.
Otro sector que creció durante el Mundial fue el comercio. Según la Asociación de Artesanos, Artistas Plásticos y Manipuladores de Alimentos de la Feira da Torre, el crecimiento en las ventas llegó al 1.000% en el patio de comidas, al 300% en las tiendas de souvenirs y al 50% en los puestos de artesanía.