Dar a luz es una de las experiencias más bonitas y completas de la vida pero también supone un cambio en el cuerpo de la mujer. Tras la materidad, cada vez son más las mujeres que quieren recuperar la figura anterior al embarazo.
El auge de esta demanda mediante la Cirugía Plástica Estética ha dado lugar a que esta tendencia en alza se acuñe bajo el término 'Mommy Makeover', entendido como el conjunto de tres intervenciones que generalmente se realizan en una sola cirugía para recuperar el aspecto físico previo al embarazo o incluso mejorarlo, aumentando así la confianza y bienestar personal. No hay que olvidar que esta disciplina tiene una finalidad terapéutica, al promover, mantener y restablecer la salud psicofísica de las personas, buscando mejorar su autoestima y calidad de vida a través de procedimientos médico-quirúrgicos.
Con el embarazo, el pecho crece de volumen para prepararse para la lactancia, el útero y el abdomen se expanden y el peso corporal aumenta derivando en una extensión de la piel que a menudo no se recupera después del parto debido a la pérdida de elasticidad de la piel en una determinada edad.
Por eso, la tendencia en cirugía 'Mommy Makeover', tiene la finalidad de recuperar la forma y tersura del pecho, conseguir un abdomen completamente plano y reconstruir la zona íntima mediante tres procedimientos concretos: Mamoplastia, abdominoplastia y cirugía íntima.
Los tres procedimientos que recoge esta tendencia son:
Mamoplastia: Esta intervención permite levantar el pecho caído tras el embarazo y la lactancia para que recupere su forma original o bien, optar directamente por un aumento de pecho que rellene el volumen de piel sobrante.
Abdominoplastia: Este procedimiento tiene como objetivo devolver la firmeza al abdomen, eliminando los pliegues de piel y la grasa sobrante a la vez que tensa los músculos a través de una incisión en la zona del pubis. Incluso se puede aprovechar para quitar la cicatriz originada por una cesárea cambiándola por otra más estética.
Perineoplastia: Esta técnica se lleva a cabo para la reparación funcional y estética de la zona íntima de la mujer. La pared del suelo pélvico y las estructuras musculares de la zona se ven alteradas con el parto vaginal donde a menudo también se hace la episiotomía. La intervención reconstruye la zona íntima y corrige la cicatriz de la incisión.
En este sentido, el Dr. Francisco Gómez Bravo, Presidente de la Asociación Española de Cirugía Estética Plástica (AECEP), recalca: "A pesar de los esfuerzos de la sociedad por valorar los grandes sacrificios que realizan las mujeres con la maternidad y que deje de afectarles en el plano profesional, a menudo no se tiene en cuenta la transformación de que sufre su anatomía y forma del cuerpo. A veces, la única solución que les permite restablecer su morfología es la Cirugía Plástica y Reparadora, tanto en el pecho como en el abdomen como en la zona íntima.
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