¿Estás planificando un viaje de invierno con tus amigos y aún no tenéis claro donde podéis ir? Si lo que queréis es un destino de nieve, pero estáis a la búsqueda de alternativas diferentes a las actividades que ofrecen los dominios esquiables, Andorra es vuestro lugar.
El Principado ofrece la oportunidad de vivir experiencias únicas y pasar unos días inolvidables rodeados de naturaleza.
Una noche en un refugio
Siempre que pensamos en refugios los asociamos al verano, pues en Andorra es posible dormir en un refugio guardado de alta montaña en pleno invierno. Lo podéis hacer en el refugio de l’Illa en el Valle del Madriu-Perafita-Claror o en el refugio Borda de Sorteny situado en el Valle Natural de Sorteny. Los refugios están totalmente equipados y ofrecen la cena, así como el desayuno para que os podáis sentir como en casa. Para acceder os proponemos que lleguéis en skimo cuando empiece a caer la noche, dejaros guiar por la luz de la luna y adentraros en los bosques siguiendo los distintos caminos. Y para acabar de redondear la estancia, os recomendamos que os levantéis bien temprano para bajar con vuestros esquís, aprovechando los primeros rayos de sol que iluminarán todo el paisaje nevado.
Descensos desde las cimas más altas
¿Sois adictos a la adrenalina y lo que queréis es vivir emociones fuertes? Si sois unos esquiadores experimentados, vuestra actividad es sin duda el Heliesquí. Sobrevolaréis el país en helicóptero y gozaréis de unas vistas privilegiadas desde el cielo. Al terminar con este vuelo panorámico, el helicóptero os dejará en una cima de las estaciones de Ordino Arcalís o de Grandvalira, para que podáis hacer unos descensos vertiginosos. Estos serán unos de los mejores fuera pistas que se encuentran en el país y seguro que disfrutaréis de la mejor nieve.
Sentirse como un esquimal
¿Quién no ha soñado nunca en vivir como un esquimal? Si sois unos apasionados del frio y tenéis el alma aventurera tenéis que vivir una Experiencia Polar en pleno corazón del Pirineo. Se trata de una expedición de dos días para descubrir la perdiz blanca, todo un símbolo de la fauna andorrana en invierno. Dejaros sorprender por la naturaleza del país, cruzando los bosques en raquetas de nieve para acabar llegando a vuestro campamento donde pasaréis la noche. En todo momento estaréis acompañados por un guía experto y su perro, que facilitará la búsqueda de esta ave. Una gran aventura apta solamente para los más valientes.
Conectar con la naturaleza
Si lo que queréis es un plan más relajado, desconectar de vuestra rutina, del ruido de la ciudad y conectar con la naturaleza, ésta es vuestra oportunidad. Andorra os propone pasar una mañana en un entorno natural maravilloso para que podáis practicar yoga, o diferentes técnicas de mindfullness. Después de la sesión, os podréis deleitar con un almuerzo healthy en una borda típica andorrana, situada en medio de la montaña. ¿Estáis preparados para reiniciar vuestro cuerpo y mente? ¡Andorra es el destino perfecto para que tú y tus amigos os lo paséis en grande con experiencias sorprendentes!.