Desde hace milenios forman parte del paisaje catalán y, generación tras generación, los olivos de la comarca del Camp de Tarragona han impregnado de tradición y cultura las tierras que habitan resistiendo al paso del tiempo. Una región donde la producción de aceite de oliva constituye una de las actividades agrícolas más ancestrales y que ha situado al oro líquido como uno de los productos fundamentales de la dieta mediterránea.
Para descubrir todos sus secretos, una de las mejores formas es conocer la región en la que se produce y desde hace unos años, el oleoturismo se alza como una alternativa al turismo tradicional y como complemento al turismo rural. Una nueva forma de sumergirse en el mundo del aceite viendo en primera persona su proceso de elaboración y conociendo la esencia de la auténtica cocina mediterránea.
Una escapada de otoño con el oro líquido como protagonista estelar
Situado en una finca agrícola de 110 hectáreas y jardines en La Canonja, a 10 minutos de Tarragona, el hotel boutique La Boella se presenta como una opción ideal para disfrutar de una escapada otoñal con el aceite como actor principal. Una estancia que cuenta con un completo programa de actividades, con catas y degustaciones como valor añadido. Una oda para los cinco sentidos que invita a vivir la experiencia de saborear un producto de origen, tradición milenaria y gusto inigualable como es el aceite de oliva virgen de la comarca del Camp de Tarragona.
Para ello, este establecimiento ha elaborado un completo pack gastronómico en el que se incluye una noche de alojamiento, cava y petits fours en la habitación, el menú de cena y el desayuno buffet con productos propios kilómetro 0, así como una botella de aceite La Boella Premium y una botella de vino Mas la Boella. Y, como broche final, una cata comentada de sus selectos aceites.
El Hotel Mas La Boella dispone de un molino donde se elaboran Aceites de Oliva Virgen Extra propios gracias a un minucioso trabajo con tres variedades de aceituna: arbequina, arbosana y koroneiki. Una finca que produce unos 190.000 litros de aceite anuales y cuya almazara está edificada sobre un edificio del siglo XII. El proceso de producción de sus aceites está basado en minimizar el uso de productos químicos reduciendo la generación de residuos apostando por aumentar la calidad del producto.
Gracias a esta dedicación y búsqueda de la excelencia en sus aceites, La Boella ha sido galardonada cinco años con el premio ACCESSIT al mejor Aceite Virgen Extra de España en la categoría frutados-maduros, otorgado por el Ministerio de Agricultura.
Además, el establecimiento pone a disposición de los clientes La Boella Celler Botiga, una tienda donde pueden comprarse los aceites de oliva de La Boella, así como vinos producidos en la masía y una completa selección de 250 referencias de vinos procedentes de las zonas más prestigiosas de todo el mundo. También pueden encontrarse un amplio abanico de productos exclusivos de la élite de la gastronomía mundial y lotes regalo de sus vinos DO Tarragona y sus aceites de oliva virgen extra.
Disfrutar del oleoturismo en la comarca del Camp de Tarragona
El cultivo de la aceituna y la obtención del aceite es una tradición milenaria que durante siglos se ha ido perfeccionando hasta convertirse en uno de los pilares de la gastronomía mediterránea. En las últimas décadas, la provincia de Tarragona ha desarrollado e implementado una producción agrícola de calidad que cada vez es más sostenible y que ha acabado teniendo un importante peso en la economía y la cultura de la zona. De hecho, los aceites tarraconenses son reconocidos mundialmente. Así lo atestiguan sus tres denominaciones de origen: DO Aceite de Baix Ebre-Montsià, DO Aceite de Terra Alta y DO Siurana. Esta última es la que se produce en la comarca del Camp de Tarragona, con presencia en más de 30 entidades.
Para los amantes de este producto, esta comarca se erige como un destino de visita obligada por las posibilidades de turismo gastronómico que ofrece y, en especial, oleoturismo, ya que son muchos los lugares de interés en los que conocer el proceso de producción. Destacan lugares como el Museu de l’Oli de la Selva del Camp o las Cooperativas de Cambrils o Riudecanyes, con visitas que permiten contemplar el trabajo realizado con la aceituna desde que se recolecta hasta que se convierte en el más delicioso y preciado aceite para ser embotellado o catado en sus variedades más selectas.
Concretamente, en la región que rodea el hotel boutique La Boella pueden encontrarse productos que han logrado posicionar a la cultura culinaria y al nombre del territorio de Tarragona en un lugar privilegiado. Algunos de ellos son el arroz del Delta del Ebro, el vino de la D.O.C. del Priorat y la D.O. Montsant, la avellana de Reus con D.O. propia, las tradicionales ‘calçotades’ con la salsa romesco típica de la provincia tarraconense o el ‘xarró tarragoní’, uno de los cocidos más afamados de la gastronomía catalana.